domingo, 24 de noviembre de 2013

¿Nuestro camino?

Aún sabiendo que vas a caer, sigues hacia adelante, hacia ese mundo que todavía no conoces. ¿Quién te dio fuerzas para andar y correr? ¿Para llegar a él? ¿Quién te dio fuerzas para sonreír cuando quieres llorar? ¿Quién te dio fuerzas para callar cuando deseas gritar?

Seguimos nuestro propio camino intentado no caer, y aún cuando caemos, que no son pocas las veces, nos levantamos y seguimos. Y, ¿de dónde surge esa fuerza para luchar por nuestros sueños? ¿Por nuestras ilusiones? ¿Por nuestros deseos? ¿Por nuestros sentimientos? Y, por qué no, por esas utopías que queremos hacer realidad. Nunca debemos dejar nuestros sueños varados en la mar del olvido mientras sean posibles de lograr.

Nuestra vida es un eterno camino en el que llueve, nieva e incluso graniza. Pero, no debemos olvidar que también es aquel camino en el que luce la radiante luz del sol.

Por nuestra vida pasan centenares de personas, algunas sin dejar huella y otras que son difíciles de olvidar. Nuestra vida envejece a cada paso, a cada caída, a cada lágrima y también, a cada sonrisa.

[Borrador de 2009]

viernes, 25 de octubre de 2013

Cruce inesperado

Hoy hablaremos de lo que no murió, de lo que simplemente se desintegró, de lo que por no terminar ni dolió. ¡Qué poderosos somos los humanos! ¡Qué fácilmente podemos mentir! Nos parece demasiado fácil ocultarnos. Otro error, de tantos.

Fue de repente cuando volvieron esos oscuros pensamientos que creía olvidados. Así, sin avisar, con el objetivo de dejarme sin respiración. Pero, cuando terminé de ahogarme, volví a respirar. Como siempre, por no variar. E, ilusa de mí, creyendo que había ganado la eterna guerra que mantengo con mi subconsciente, la realidad vino con toda su corte. 

Iba paseando tranquila de vuelta después de una noche de reencuentro y pusiste la guinda al pastel. Levanté la vista del suelo pues a veces, solo puedo mirar el suelo y allí estabas tú, nada elegante, tan inmutable. Eras como el de antes, aquel que nunca conocí. O, quizás, aquel que conocí demasiado, eras tan evidente. Y, mientras mi mente procesaba la información de estar viéndote, tú, cobarde, quitaste la vista del frente, donde me encontraba yo, y miraste hacia otro lado. ¡Oh! Me sorprendió tanta cobardía, tan escasa indiferencia, como si no hubieras superado lo que ocurrió y lo que no. Y, desconcertada, yo tampoco hice nada, lo reconozco. Pero, cariño, he de decir que me hiciste sonreír. Pues yo no desvié la mirada, yo me enfrenté a ti. Y tú, volviste a ser incapaz de coger la realidad y hacerla a tu medida. Como cuando no tuviste el valor de matar y rematar algo que se estaba muriendo y que tú sabías y que yo, quizás, obviaba. Cuando diste el paso, no debiste quedarte a medias.

Y, mi historia contigo no fue más que comodidad. Ahora lo sé. Alguien me enseñó cómo se sienten las certezas y tú, no eras una de ellas. Pero, quizás lo sabía y la inexperiencia me mató. 

Intenté negar lo que pasó, correr un tupido velo. Sin embargo, hay cosas que no pueden ser tapadas pues empiezan a oler a podrido y a hacer mucho ruido. Hay cosas que deben ser asumidas aunque sean la confirmación de lo que ahora creo que fue una equivocación.

Y, no es rencor lo que colorea mis palabras sino satisfacción por ser capaz de soportar una situación que tanto tiempo había imaginado que ocurriría pero, que esperaba que no sucediese. Lo único que estoy haciendo es poner el punto final a ese párrafo que no acabó y que por no hacerlo, duele como duelen las cosas que no terminan.

martes, 10 de septiembre de 2013

Clase magistral: amor

Ella es despistada y olvidadiza. Es el desorden personificado y la claridad mental. Algunos consideran que tiene perdido el norte pero, no hacen sino mirar con los ojos de la apariencia, esa eterna engañadora que aún hoy sabe como hacer sucumbir nuestras más agradables predisposiciones. 

Ella lo niega pero, es fácil ver como está subida a lomos de gigantes, de los gigantes de la literatura. Ellos tienen muchas cosas que enseñarnos, tantas como ella. Ella conoce el camino hacia la sabiduría. Y, por raro que parezca en este mundo en el que vivimos, lo comparte con un sonrisa dibujada en la cara.

Nuestro tiempo juntas fue efímero igual que el tiempo de toda cosa en este mundo. Todo es efímero pues nada se encuentra por siempre inmutable. El movimiento es cambio y el cambio, vida. 

Ella conseguía darle a mis mañanas un sentido diferente. Viviendo, de repente, un espejismo de sabiduría. Pocos la escuchaban y menos, la entendíamos completamente. Sin embargo, ella nunca lo tuvo en cuenta. Demasiada bondad en un único corazón. 

Desde el principio, tuvo mi admiración y entonces, un día nos habló del amor. Algo demasiado abstracto y observable, algo no tangible... ¿Cómo hablar de algo que algunos conocen y todos desean? 

Tengo la certeza de que ninguna de las palabras que he de utilizar fue pronunciada jamás por sus labios. Seguramente y no es muy improbable, haya tergiversado ciertas partes y añadido mis matices personales pero, solo soy dueña de mis recuerdos. (Quizás, sea más fiel a lo ocurrido de lo que creo, no he de llevarme, por tanto, ningún mérito.) Y, ni siquiera de eso. ¿Cuántas veces creemos recordar algo que nunca pasó? Entre otras muchas cosas.

En cambio, todos podemos ''recordar'' el amor aunque no sea personalmente.

Mis recuerdos me cuentan que el amor es como una esfera donde hay dos partes, unidas por una tercera. En una de las partes, estaría la pasión, el furor, el enamoramiento, el desasosiego, es decir, la locura amorosa; en la otra, la familia, los amigos, la patria, los Dioses... La tercera, la que une, sería la dominada por el sexo, por la existencia carnal que hace revivir el furor como ebriedad. La balanza que mantiene equilibrada una parte con la otra pues cuando una de ellas se desequilibra, los resultados pueden no ser siempre, agradables. Es la balanza que nos hace relacionarnos con lo terrestre, estando en lo celestial, esta vez, necesitamos tocar la tierra. 

La balanza nos permite unir la existencia en cada lugar de una misma persona. Pero, es necesario no olvidar que la balanza ha de cuidarse, siempre, como todo. 

La esfera del amor. 







martes, 21 de agosto de 2012

L'importance

Soy autodestructiva.
Celosa y posesiva, egoísta y pesada, paranoia y aburrimiento, remordimiento y daño, malsana y cambiante, mentirosa e indecisa, contestona e ileal, triste e incomprensiva, difícil y enfadona...
Soy muchas cosas y no soy muchas otras.

''- C'est le temps que tu as perdu pour ta rose qui fait ta rose si importante.
 - C'est le temps que j'ai perdu pour ma rose... fit le petit prince, afin de se souvenir.''

Antoine de Saint Exupéry, Le Petit Prince.

Soy tu rosa y tu mi principito.
Es el tiempo que pasas conmigo lo que me hace importante y especial.
 


domingo, 15 de julio de 2012

Impression, soleil levant. C'est possible?

Hoy.
Terrible e inevitable concepto que despierta mi alma ya intranquila y se convierte sin avisar en ayer, mañana, nunca, siempre...
Hoy.
Cuando el arte parece haberme obviado, cuando la soledad se hace demasiado tangible, cuando demasiados pensamientos llegan a mi alma, cuando (como la sonrisa) el echar de menos se ha convertido en un rasgo de mi personalidad, cuando deseo independencia pero, no olvido, cuando no hay proyectos realizables, cuando la ilusión inmediata parece haber desaparecido, cuando deseo dormir pero, no sin soñar, cuando todo cambia al paso de la realidad...
Hoy.
Cuando hace mucho tiempo que dejé olvidada en un rincón esa burbuja de indiferencia que solía mostrar mi tez. Menos mal.
Hoy.
Cuando creo en las utopías, en los sueños y las posibilidades, cuando todo es perspectiva e ilusión, cuando el condicionamiento puede serlo todo, cuando conozco secretos del conocimiento...
Hoy.
Cuando ellas, aún diferentes pertenecen a mi vida. Diferentes son sus nombres y diferentes sus secretos. Amo sus almas.
Hoy. 
Cuando ellos, desorientados y atados se muestran cansados. Os voy a ayudar.
Hoy. 
Cuando creo que un abrazo sí puede cambiar el mundo.
Hoy. 
Cuando ser pequeños, diferentes e irrepetibles ya no significa algo malo.
Hoy. 
Cuando por encima de los problemas, la vida sigue estando presente.
Hoy. 
Cuando él sigue haciendo vibrar mi existencia.
Hoy. 
Cuando el amor lo es todo. Sin él, nada es posible. Estamos solos pero, no somos solitarios.
Hoy. 
Cuando es necesario vivir, le soleil levant.


P.D: Hoy. Cuando la reiteración me sigue caracterizando.

miércoles, 30 de mayo de 2012

L'amour c'est la grande aventure de la vie

Ella me preguntó si eramos nosotros.
A través de la ventana, la conjunción de luna y  lámpara se filtraba. Una ligera brisa helada nos daba la excusa perfecta para permitir a nuestros cuerpos tocarse libremente, aunque nunca hemos necesitado excusa. Mi cabeza sobre su pecho se deleitaba con su pulso tranquilo y agradable, aquél por el que yo enloquecía. Mis manos jugueteaban sobre su amarilla camiseta mientras él, espontáneamente, lo obviaba.

En algunas ocasiones, nuestros labios conversaban del arte de la música, un poco de aquí y un poco de allá. Me encantó compartir algo tan importante contigo. Pero, realmente eran nuestros cuerpos y nuestros corazones los que conversaban en ese lenguaje secreto del que nunca se habla.

Parece que se nos ''olvida'' cotidianamente a ambos. Sin embargo, sabes que te quiero por encima del cielo. Allí, donde todo es demasiado para poder entenderse. Tú justificas mi existencia, por ti vivo y contigo muero. Sin ti no hay felicidad posible y contigo, lo más grande es posible. Mi gran aventura en esta vida eres tú, el amor. Quédate conmigo esta noche, necesito poder amarte eternamente.

La luz volverá pronto, siempre lo hace.

viernes, 25 de mayo de 2012

¿Acaso conoces mi verdadero nombre?

De repente me escupes un ''¿Qué vas a hacer? Me tienes que mantener informado.'' Atónita no puedo defenderme, creo que sabes que juegas con ventaja porque no tengo argumentos una vez más. No importa, salgo al paso. Contraataco y te aplaco.

Pero, el mercenario nunca se cansa de atacar, ama la sangre desparramada sobre su calva. Durante una hora, irientes envestidas me diriges. Nunca cansado, solo tengo ganas de llorar. Solo buscas la perfección y yo no soy apta. Insinuas que no lo intento. ¡No me conoces! Solo la meta aceptas. Eres consciente de que la conquista no ha acabado y una hora después exclamas ''Hay que comprender a los Pitagóricos, hay que ponerse en su lugar.''

¿Acaso hacemos esto en la realidad actual? ¿Aquí y ahora? ¿Acaso te has puesto en mi lugar? Ah, no, se me olvidaba. Tú eres el Gran Hermano.  

Mi corazón aunque tiempo atrás ''olvidado'' quizás, vuelve a recordar el llorar lágrimas amargas. Pero, no. Yo juego con ventaja pero, no lo utilizaré y sabes que no lo haré. Te conozco. Solo te escondes en bromas varias, chistes lúcidos e ideas a veces, compartidas. Solo te escondes. Después, siempre fallas. Nunca yo, siempre te encuentran la errata. 

Esta vez, no.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Mil soles en tu regazo


Hubo un tiempo en el que todas las distancias me parecían infinitas y lejanas. Entonces, la brisa trajo tu aliento. Creía que una gran distancia separaba nuestros latidos. No, solo era el reflejo de tu alma aquél que me cegaba. 

Pero, al ritmo de esas canciones que elevan mi alma, me acerqué sin miedo a ti y allí, mil soles encontré. Esperando en tu regazo, esperándome, anhelantes de mí.

A veces cuando me despisto la oscuridad vuelve para intentar sujetarme fuerte pero, tú, siempre estás ahí, a veces invisible, para llegar de nuevo y alejar fantasmas irreales con tus mil soles espléndidos. 

Mil soles espléndidos en tu regazo y tus labios cálidos susurrando aquellas palabras que nunca olvidaré porque por ellas, mil soles pude cruzar hacia ti. Mil soles espléndidos significas para mí, la luz eterna de lo sublime. 

Nunca existió en mi corazón miedo por desaparecer ante la finitud del mundo porque tú iluminas mi eternidad, hasta mi final.

sábado, 5 de mayo de 2012

Notre mémoire

Esta vez no era una voz en off la que narraba la realidad. Esta vez era mi propia voz.

Hecho circunstancial, decisión espontánea. Ellos, la habían alejado de mí. No me recordaba, no me conocía, no sabía ni siquiera como me llamaba. No recordaba nuestra vida, nuestra memoria, nuestro amor... Yo, para ella, no tenía identidad. Ella, para mí, ¿era algo más que un recuerdo?

No podría explicar cuanto la amaba aún si se me otorgase tal don. Solo sé que la amaba porque era el ser más perfecto que nunca hube de conocer, porque era mi refugio, mi musa, mi felicidad, mi ''vaga ella''. La amaba, ¡cuánto la amaba! 

Entonces, hecho circunstancial, decisión espontánea. Ellos, la habían alejado de mí. Horrible, más que horrible. Escuché su llanto, el desconocimiento en su mirada, el ansiedad de su alma... Y yo lo intentaba pero, ¡qué difícil era no amarla!

Horrible, fue horrible que ese amor nuestro, ese amor único, irrepetible, inigualable no fuese recordado. A ella, sin identidad, yo la amaba. Aunque parecía realmente no ser ella. Poco a poco, pude ver que tras todo lo que ellos parecían haberle hecho, yo, la seguía amando porque ahí estaba, ella, mi ella

La amaba, ¡cuánto la amaba!

Aún en la desesperanza y teniendo miedo de perder nuestra vida, nuestra memoria, que yo solo recordaba, todo comenzó a suceder otra vez, aunque no igual. Porque hecho circunstancial, decisión espontáneos, ellos, ya no pudieron alejarla de mí. 


Y Ella empezó a recordar cómo me amaba. 

-No recuerdo la primera vez que te dije ''te quiero''.
-Da igual. No recuerdes, solo vuelve a sentirlo. He aprendido que nuestra vida se vive, no se piensa. 
-Te quiero.
-Lo recuerdo.

sábado, 24 de marzo de 2012

Un infinito encarcelados en tu ser


Milenios atrás, en nuestro recuerdo, quedaron esas noches de ensueño, el rastro de unos besos...

El rítmico impulso de tu corazón, tranquilizaba mi, quizás, no tan ficticia enfermedad. Tu cuerpo ardiente refugiaba mi insólita alma. E insaciable, mi boca anhelante de tu aliento se encontraba. Aquel lugar con nombre, el lugar de dos cuerpos, el de una sola alma...

Nosotros, sedientos de amor, arañando con pasión nuestra piel, vivíamos. Pequeñas esencias amorosas de jazmín nos regalamos antes de ser moldeados por la prolongada duermevela.

Entonces, desperté. Mi existencia, tiempo atrás ligada a tu esencia, tembló febrilmente. Mientras vagabas por sueños nunca jamás recordados, cada centímetro de tu piel irradiaba la más sublime luz nunca conocida. Te besé inefablemente, poniendo la ternura que solo el amor puede inspirar.

Aunque conocedora de un momentáneo desconocimiento, he de decir que resultó ser esa realidad que naturalmente, hacia lo trascendental me lleva.


I will always love you until the end of time.
Ich liebe dich.
Je t'aime
Ti amo

martes, 6 de marzo de 2012

Leonas heridas

A pesar de las vicisitudes, aquí, inmutable y eterna, por ti y para siempre.

miércoles, 29 de febrero de 2012

Ente



Se dice que todo ente ocupa un lugar natural en el universo. 
Por eso, yo tiendo hacia tu alma. 



 Eso es mentira, túu estás conmigo en las nubes ^.^

domingo, 26 de febrero de 2012

Nocturne

Era absurdo, era imposible. No se puede expresar lo que se siente.
Al faro, Virginia Woolf.


Mientras mis manos ya fatigadas de tan largo camino se deslizaban seguras por esas teclas casi descompuestas, estas palabras no dejaban de revolotear en mi cabeza. No podía ser cierto, mi corazón herido era escuchado por él aunque según ellos, él careciese de vida. No podía ser cierto que la música que en mí se componía no existiese. Ella siempre ha sido el reflejo de mi voz.

sábado, 4 de febrero de 2012

Me encantó bailar contigo

Ella era la mujer más hermosa que nunca nadie había tenido la oportunidad de ver. Era más hermosa que el sol y la luna, que las estrellas. Nunca tuve la certeza de echarle de menos pero, realmente, no pude más que sobrevivir sin su luz. Milenios de tiempo, me separaban de su eterna existencia y ya, apenas, se desdibujaba en mi mente los trazos de su alma.

Entonces, llegando el esperado final de mi vida, volví volando junto a ella para por primera y última vez probar el néctar de sus labios. Mientras bailaba y bailábamos, me desintegré velozmente, confundiéndome con su alma y entonces, dejé de ser...
Y, comencé a existir.

Me encantó bailar contigo...

jueves, 5 de enero de 2012

Ojos cerrados

Siempre me había jactado de no temer a la muerte.

Pero, anoche, de madrugada, como si del alarido de un animal salvaje se tratase, llegó con fuerza la certeza de que un cambio infinitesimal en cualquiera de las variables presentes, me habría podido causar la muerte o quizás, daños irreversibles de por vida; y no solo a mí.
Entonces, mi corazón comenzó a palpitar con fuerza ahogando el mismísimo sonido de mi respiración. Mi cuerpo ya no me pertenecía, no podía moverlo, estaba petrificada de miedo, mientras en mi mente se sucedían imágenes de la más pálida oscuridad.

Pero, finalmente, llegó un intermitente rayo de luz que poco a poco se hizo más poderoso y gracias a él, de nuevo, mi cuerpo me volvió a pertenecer. No pude hacer otra cosa más que llorar con lágrimas amargas ya que era consciente de que yo misma nunca me podría haber salvado de aquel desastre, sin más. 

Ahora, amo demasiado mi vida.